domingo, 17 de junio de 2007

Farinelli

“Retrato de Farinelli”. Jacopo Amigoni
Museo de Bellas Artes de Bucarest (Rumanía)



“Lascia ch’io pianga”
(“Déjame que llore / mi cruda suerte / y que añore / la libertad”)


“Despertar la parte de infinito que hay dentro de nosotros”

“Compartir el misterio”

La voz – piensa Farinelli (Carlo Broschi) - es un don divino, un ajuste de cuentas del Señor con la mediocridad. Para mí, la palabra amor ha sido siempre sinónimo de dolor, de fracaso. El precio más costoso que tuve que pagar a cambio de todo lo demás.


Enlaces: Filomusica Opusmusica La Voz Católica

domingo, 20 de mayo de 2007

El honor perdido de Katharina Blum

o Cómo surge la violencia
y adónde puede conducir

Heinrich Böll

... und wohin sie führen kann
En 1974, dos años después de recibir el Nobel, Heinrich Böll, la figura más emblemática de la literatura alemana de posguerra, escribió El honor perdido de Katharina Blum, llevada a la pantalla por Schlöndorff, una novela sobre las consecuencias que los manejos y el eco de la prensa sensacionalista pueden tener en una persona.


En ella, el escritor alemán Heinrich Böll, nacido en Colonia en 1917 y fallecido en 1985, muestra las consecuencias que los manejos y el eco de la prensa sensacionalista pueden tener en la vida del individuo. Katharina, acosada por un público ávido de sensaciones y dispuesto a creerse cualquier titular, cuanto más truculento mejor, llega hasta el extremo de cometer un crimen con impresionante sangre fría.



La protagonista, cuya historia está basada en un hecho real, tiene total seguridad moral y no parece sentir ningún remordimiento después de haber disparado contra el periodista gráfico que, recurriendo a la manipulación, no dudó un solo momento en destrozar su vida privada. Mentiras, difamaciones y calumnias se extienden en un caso como éste con mucha mayor facilidad que la verdad.

Ingenua, algo romántica e inteligente, Katharina Blum es tan extremadamente sensible en relación con el sexo, que casi roza la mojigatería. Y, sin embargo, es una de esas raras mujeres que son capaces de amar a un hombre más allá de las convenciones sociales. Se entrega con la mayor espontaneidad. Katharina se enamora de un fugitivo de la justicia, sospechoso sin prueba alguna de ser un terrorista. Y la sociedad, como es de esperar, le hace pagar por ello. A partir de entonces será acusada de ser su cómplice. La prensa, la policía y la justicia se unirán para destrozar su reputación, hasta hacer de su vida un infierno.

Silenciosa y discreta, Katharina tiene el valor de regirse por su propio código moral, un sistema de valores que se funda en unas normas propias, no escritas, ni heredadas. Posee además dos cualidades mortales: la lealtad y el orgullo, esa integridad tan difícil de encontrar, que puede resultar extremadamente peligrosa por ser tan pocos los seres humanos que la poseen o que siquiera saben valorarla. Katharina vive en éste y a su vez en otro mundo, ignorado por los demás, inaccesible para la mayoría.


«Pasan demasiadas cosas en primer plano, pero no sabemos nada de lo que ocurre en un segundo plano», afirma el narrador.




“-Sí –admitió Katharina Blum, y desde aquel momento levantaron acta de su declaración, que quedó archivada-; eso es cierto. Representa, según un cálculo aproximado que he hecho, casi veinticinco kilómetros diarios. Nunca lo he pensado ni tampoco he reparado en el gasto. A veces, me sentaba al volante y corría sin rumbo fijo; quiero decir, que yo viajaba en cualquier dirección sin haber previsto nada: al sur, hacia Coblenza, o al oeste, hacia Aquisgrán o el Bajo Rin. No todos los días; me resulta imposible precisar cuántas veces y con qué intervalos. Por regla general, cuando llovía, después de terminar el trabajo y cuando me sentía sola. No, rectifico mi declaración: única y exclusivamente cuando llovía. No sé bien por qué. A veces, cuando no me correspondía acudir a casa de los Hiepertz y no tenía ningún trabajo especial, a las cinco ya estaba en casa sin nada que hacer. No siempre me apetecía ir a ver a Else, sobre todo desde que ella mantiene amistad con Konrad, e ir al cine tiene sus riesgos para una mujer sola. En ocasiones, me he sentado en una iglesia, no por motivos religiosos, sino porque allí hay tranquilidad, pero, en los últimos tiempos, también en las iglesias se meten con una, y no solamente los seglares. Desde luego, cuento con algunos amigos: por ejemplo, Werner Klormer, a quién compré el Volkswagen, y su señora, y también otros empleados de la empresa Kloft, pero es bastante difícil, y por lo general penoso, presentarse en casa de esas personas así, por las buenas. De modo que yo prefería sentarme al volante, poner la radio y el motor en marcha y correr siempre bajo la lluvia, y preferentemente por carreteras arboladas. A veces, me llegaba hasta Holanda o Bélgica, bebía un café o una cerveza y luego regresaba. Sí. Ahora que usted me pregunta lo veo claro. Si debo precisar cuántas veces, yo diría que dos o tres al mes; a veces más o acaso menos. Las salidas duraban horas. Por último, yo regresaba a casa cansadísima, alrededor de las nueve o las diez, e incluso cerca de las once. Es posible que la causa de mi conducta fuera el miedo; ¡conozco a tantas mujeres solteras que se emborrachan cada noche solas ante el televisor!”.

“... Tampoco queremos ocultar a nadie que Katharina dijo a la señora Woltersheim acerca de Götten:
-Dios mío! Él ha sido, simplemente, el hombre que debía llegar, y con el que yo me hubiera casado y con quien habría tenido hijos... aunque hubiera tenido que esperar años hasta que saliera de la cárcel”.

“... En aquel momento, Katharina sacó dos números del PERIÓDICO de su bolsillo y preguntó si el Estado –tal es el término que empleó- no podía hacer nada para protegerla contra semejante inmundicia y para devolverle su buen nombre. Admitía que su interrogatorio estaba justificado, aunque no comprendía “por que debía entrar en tantos detalles”. Sin embargo, no acertaba a explicarse cómo algunos de esos detalles –por ejemplo, las visitas de caballeros- podían haber llegado a conocimiento del PERIÓDICO, y de dónde procedían aquellas declaraciones inventadas. En este punto intervino el fiscal Hach, quién manifestó que, naturalmente, a causa del enorme interés público del caso Götten, se había tenido que dar una explicación a los reporteros, aunque estaba aún por celebrarse una conferencia de prensa. Ésta, por otra parte, sería ya difícil de evitar, dada la excitación y el temos que había causado la fuga de Götten, que Katharina facilitara. Por lo demás, ahora, en virtud de su vinculación con Götten, se había convertido en un “personaje de actualidad” y, con ello, en objeto de un justificado interés público. Los detalles ofensivos y posiblemente difamatorios de la información podría convertirlos ella en materia de demanda judicial si llegaba a demostrarse que se habían producido “filtraciones” en la investigación. Sus responsables podían tener la seguridad de que presentarían una denuncia contra quien procediera, y de que defenderían los derechos de Katharina. A continuación, internaron a ésta en una celda. Renunciaron a la vigilancia excesiva. Sólo la acompañaba una joven asistente de policía, Renate Zündach, sin armas, quien más tarde declarón que, durante todo el tiempo –aproximadamente dos horas y media-, Katharina Blum no había hecho otra cosa que leer repetidas veces los números del PERIÓDICO. Rechazó el té y los bocadillos, no de forma brusca, sino “casi en tono amable y apático”. También rechazó todas las conversaciones sobre modas, cine, baile, etc., que Renate Zündach intentó iniciar.
Entonces, para ayudar a la Blum, que se había enfrascado en la lectura del PERIÓDICO, la dejó por un momento al cuidado de su colega Hüften, y fue a buscar en el archivo informaciones de otros periódicos, que trataban de forma absolutamente objetiva las implicaciones del caso, el interrogatorio de la Blum y el posible papel de ésta en el asunto. Se trataba de noticias breves en tercera o cuarta página, en las cuales ni siquiera figuraba el nombre de la Blum, a la que simplemente mencionaban como una tal Katharina B., empleada de hogar. Por ejemplo, el periódico Umschau se limitaba a consignar una información de diez líneas, desde luego sin foto, en la cual se leía que una persona probadamente íntegra se había visto complicada en el asunto, lo que resultaba lamentable. Todo esto –la celadora le había mostrado un total de quince recortes de periódicos- no la consoló en absoluto. Katharina tan sólo manifestó:
-¿Y quién lee esto? Todos mis conocidos leen el PERIÓDICO.”


Fragmentos de la novela "El honor perdido de Katharina Blum" de Heinrich Böll
Enlaces: IMDb Deutsches-filmhaus.de elmundo.es

viernes, 11 de mayo de 2007

David LaChapelle

"Escaping reality by creating a new reality"

David LaChapelle, el llamado “Fellini de la fotografía”, ha fotografiado a personalidades tan diversas como Tupac Shakur, Madonna, Amanda Lepore, Eminem, Philip Johnson, lanza Armstrong, Pamela Anderson, Lil' Kim, Uma Thurman, Elizabeth Taylor, David Beckham, París Hilton, Leonardo DiCaprio, Hillary Clinton, Muhammad Ali, y Britney Spears.

LaChapelle nació en Connecticut en 1969. Se graduó como artista en la Escuela de Artes de Carolina del Norte antes de mudarse a New York. Luego LaChapelle se matriculó en la Liga de Estudiantes de Artes, y en el School of visual Arts. Andy Warhol le ofreció su primer trabajo profesional disparando para la revista Interview. Recientemente situado entre los primeros diez más importantes fotógrafos en el mundo por la revista American Photo, ha continuado recibiendo numerosos premios.


Las imagenes de LaChapelle, libres, extrañas y magníficas, han aparecido en Italian Vogue, Vanity Fair, ID, Vibe, Interview, The Face, GQ, etc.. Su dedicación inflexible a la originalidad es leyenda en el mundo de la moda, el cine, y la publicidad. LaChapelle ha hecho c
ampañas de publicidad para variedad de clientes incluyendo, Iceberg, MTV, Ecko, Diesel, Sirius, Ford, Sky Vodka y Got Milk. David ha fotografiado numerosas cubiertas CD para artistas como Macy Gray, Moby, No doubt, Whitney Houston, Lil' Kim, Elton John, y Madonna.


Lil' Kim (2000). David LaChapelle


“De pequeño, tenía un poster de Elton John en la pared de mi habitación y sabía que había un sitio, en algún lugar del mundo, donde las personas que eran diferentes y creativas eran aceptadas y se lo estaban pasando bien”.
“Trabajas con personas que están obsesionadas con comprar, obsesionadas por poser cosas y comprar cosas, como si comprar fuera a darles la felicidad. Y quieres decírselo, ya sabes: no hay finca, por extensa que sea, que pueda llenar ese vacío”. “...Luego vas a esas casas de Bervely Hills que tienen diecisiete habitaciones y son como gigantescos decorados de teatro para el divorcio”.
Dice que, cuando lo contrata una “gran empresa comercial”, lo acepta, porque “si no lo hago yo, otro lo hará. Y voy a meter el dinero en mi película... Voy a reautilizarlo para crear obras”. Suelta una risita un poco vergonzosa, como si se diera cuenta de que lo que dice no resulta muy convincente.
(Extracto de una entrevista de Emma Brockes).


Enlaces: The Guardian Qatro Iconia


martes, 8 de mayo de 2007

Carmina Burana

















Orquesta y Coros Ciudad de Almería



En 1803, en el monasterio benedictino de la ciudad de Beuern (Baviera, Alemania), se encontró una colección de 300 poemas goliardescos recogidos en un manuscrito de la primera mitad del siglo XIII. La mayor parte de los poemas estaban escritos en latín aunque unos cuantos lo estaban en una mezcla de latín y alemán, e incluso con algunas palabras francesas. Sus autores eran clérigos que llevaban una vida licenciosa y desordenada y se inspiraron tanto en composiciones populares contemporáneas, con frecuencia groseras, como en las cultas de Homero, Cátulo y Ovidio. Los dos principales temas que desarrollan son el amoroso y el satírico contra la iglesia.

El compositor alemán Carl Orff (Munich 1895 - Munich 1982) autor del famoso método musical para niños Orff- Schulwerk (1930) recopiló 25 de estos poemas en una cantata escénica a la que llamó Carmina Burana (Poemas de Beuern), cuyo fragmento más conocido es el O Fortuna, que constituye la primera parte del preludio y que se repite al final de la obra. Orff subtituló la composición: Cantiones profánae cantóribus et choris cantándae comitántibus instrumentis atqüe imáginibus mágicis (en latín: ‘canciones laicas para cantantes y coreutas para ser cantadas junto a instrumentos e imágenes mágicas’). Combina la poesía profana del siglo XIII con una música intensa y deliberadamente sencilla para gran orquesta y coro, estructurada con ritmos enérgicos y vibrantes y ricas sonoridades. El estreno de esta obra se produjo en Frankfurt en 1937.



























O Fortuna velut luna statu variabilis, semper crescis aut decrescis; vita detest
abilis nunc obdurat et tunc curat ludo mentis aciem egestatem, potestatem dissolvit ut glaciem. Sors immanis et inanis, rota tu volubilis, status malus, vana salus semper dissolubilis, obumbrata et velata michi quoque niteris; nunc per ludum dorsum nudum fero tui sceleris. Sors salutis et virtutis michi nunc contraria, est affectus et deffectus semper in angaria. Hac in hora sine mora corde pulsum tangite; quod per sortem sternit fortem, mecum omnes plangite!.

Oh Fortuna, variable como la Luna como ella creces sin cesar o desapareces. ¡Vida detestable! Un día, jugando, entristeces a los débiles sentidos, para llenarles de satisfacción al día siguiente. La pobreza y el poder se derriten como el hielo. ante tu presencia. Destino monstruoso y vacío, una rueda girando es lo que eres, si está mal colocada la salud es vana, siempre puede ser disuelta, eclipsada y velada; me atormentas también en la mesa de juego; mi desnudez regresa me la trajo tu maldad. El destino de la salud y de la virtud está en contra mía, es atacado y destruido siempre en tu servicio. En esta hora sin demora toquen las cuerdas del corazón; el destino derrumba al hombre fuerte que llora conmigo por tu villanía.


Fuentes: Teleprensa Kareol Wikipedia ElPoderDeLaPalabra

domingo, 29 de abril de 2007

HIERBA MORA de Teresa Moure

Breton Peasant Women (1894). Paul Gauguin, 1848-1903

Del Libro de mujeres de Hélène Jans
Mucho sufren las manos de mujeres en los trabajos cotidianos, que la mayoría no son capaces de preservar la piel fina y alisada por las muchas cosas que hacen cada jornada. Por eso, si queréis resguardaros de estos males, podéis hacer unas mudas que ahora explico. Tomad una escudilla de zumo de uvas aún no maduras, y otra de hiel de vaca, y media de jabón rallado y tres onzas de aceite de pepitas y otras tres de adormideras, y onza y media de aceite de almendras amargas, y una onza de aceite de mata, y un poco de azufre bien molido y otro poco de azogue muerto con saliva. Lo habéis de juntar todo en un vaso y puesto al fuego estará hasta que se deshaga el jabón y, como esté deshecho, lo echaréis en una redoma de vidrio y lo curaréis al sol nueve días, removiendo cada mañana dos o tres veces para que no haga asiento. Y una vez sea curado, lo pondréis en las manos. Y cuanto más lo traigáis puesto sin lavaros, tanto mejor es, que las manos lucirán como si no estuviesesn trabajadas y consumidas por los esfuerzos de la vida. Y mirad que cuando os laváis le quitáis vida al cuerpo, puesto que arrojáis al agua lo que es suyo, que no se debe lavar sino lo que está sucio y el cuerpo humano tiene su propio aroma, distinto en cada uno de los individuos para que, igual que somos conocidos por la figura a la vista, podamos ser reconocidos por la nariz según el olor que desprendemos. No vi madre que no reconociera a su cría con el olfato, ni amante que no enloqueciera por el olor de su amada, que las que mucho esconden con menjunjes lo que les parece asqueroso están matando una forma de ser ellas mismas. Sin embargo, las mudas para las manos no ocultan nada, sino que protegen para que no se instalen los males en los dedos o la palma, no vayan a pensar, quienes así os viesen en mal estado lucidas, que sólo movéis los dedos y nunca trabajáis con el pensamiento.
.... es propio de la mujer adornarse y preparse, peinarse, perfumarse y ungirse como si fuese una diosa para olvidar que algún día su preciado cuerpo será pasto de gusanos. Y puesto que hombres frecuentan amantes pulidas, yo misma he caído por veces en el defecto de querer gustar y encender pasiones, como si las personas pudiésemos mejorar con unturas. Pues, aunque no convenga abusar de ellos, natura nos ofrece aromas que podemos aprovechar. Para hacer un perfume almizclado que bien puede usarse en los conjuros de enamoramiento, tomad una parte de agua de azahar, y do de agua rosada, y un poco de agua de trébol, y otro poco de mirto y algo del rosal espinoso que acostumbran a llamar mosquete. Una vez juntas todas esta aguas en una redoma, pondréis en ella una pizca de ámbar y otra de almizcle molido, y finalmente un poquitín de algalia. Y, tapada la redoma, la pondréis a curar al sol removiéndola cada mañana hasta un total de nueve y luego ya podéis usarla, teniendo buen cuidado de a quién os dais a oler con tal perfume, no produzcáis desasosiegos sin tino y pasiones que no podáis atender. También huele mucho y muy bien el agua que se hace tomando una libra de rosas rojas y otra de azahar, y otra de brotes de laurel, y otra de raíces de azucena junto con dos onzas de clavo de giroflé y media onza de lavanda. Una vez mezcladas todas estas cosas, hay que sacarlas por alquitara a fuego manso. Las aguas que resultan son muy finísimas y permiten tener sensaciones agradables cuando la vida no ofrezca más pasión que la del olfato. Que, aunque todos los sentidos alimentan los placeres y ofrecen calma y dicha, no trabajan por igual: la vista alimenta la lujuria, el oído trabaja para la ternura, el tacto para el amor, el gusto produce hartura y el olfato nostalgia, que no parece a los teólogos pasión, no siendo otra cosa sino la brasa que mantiene el fuego ardiendo.

***

De las muchas formas que hay de enamorar, una de las más poderosas, de las más sugerentes y de las más excitantes es el enamoramiento literario. Que bien se podría llamar así a la llama que se enciende cuando uno intercambia escritos con otra persona. Desde luego que la chispa inicial seguro que la pone el cuerpo con sus evidencias, pero el alma que escribe va alimentando el fuego para hacerlo arder de forma apropiada. ... De las muchas formas que hay de enamorar, alguna es muy sutil y aparece en personas sensibles y tiernas, que le tienen afición a la escritura, y por eso mismo cuando leen o cuando escriben ponen ahí el alma toda para que la otra persona en cuestión pueda, viendo el alma desnuda, adaptarse a ella y desearla, y puestos ya a desear el alma, les venga algún pensamiento de esos que llaman malos, que a saber por qué se llamarán malos pensamientos los pensamientos amorosos y juguetones, que nos abren la ventana de la imaginación para intuir la forma en que acariciaríamos precisamente a esa otra persona entre todas las personas que en el mundo han sido.
Se dice aquí todo esto porque la correspondencia es una cosa peligrosa. ... Que escribir cartas es agasajar con palabras y las palabras, si están bien escogidas y el alma en su justa sazón, pueden curar mejor que las hierbas mágicas, que parece que prolongan el placer como los afrodisíacos y atenúan el dolor como los analgésicos, que por algo afrodisíaco y analgésico también son palabras.


Fragmentos de la novela "Hierba mora" de Teresa Moure.
Fuente:
"Paintings" T. Gylfason - HÁSKÓLI ÍSLAND

El país de las maravillas

Magic realism plus real magic
Wonderland (1999). A Film by Michael Winterbottom

Personajes normales en busca de una salida, buscando el sentido y la satisfacción contra el telón de fondo de las vistas diarias de Londres – lugares banales que de alguna manera resultan conocidos, vibrantes y maravillosos.


Fuentes: Kinoweb Britmovie About


jueves, 26 de abril de 2007

Imagine...

Picasso's Guernica: The Powerful Anti-War Symbol

FUEGO Y SANGRE SOBRE LA CAPITAL
Por Silverio E. Escudero
La maravillosa Guernica, la antigua e histórica capital de los vascos, el 26 de abril de 1937, fue víctima del más cruel de los crímenes de la guerra. Una fuerte escuadrilla de la tristemente célebre Legión Cóndor se lanzó –impune- contra cientos de hombres y mujeres desarmados que trataban de seguir viviendo en medio de la tragedia. La suerte de la Guerra Civil estaba echada. Los ejércitos franquistas dominaban el escenario y el general Emilio Mola Vidal, sostenía –orgulloso- ante la prensa internacional que -en el frente vasco- era responsable de “la mayor carnicería de esta guerra hasta ahora”.
Los vascos se batieron con denuedo. No bajaron los brazos en ningún momento. No sólo debieron pelear contra el fascismo sino con supuestos aliados que manejaban a su antojo la solidaridad internacional -a través del Socorro Rojo- cuyos comisarios políticos –muchas veces- impidieron se recibieran armas, pertrechos y alimentos en el frente de batalla. La miseria era tal que, el presidente del gobierno autónomo, José Antonio Aguirre, que había jurado a la sombra del histórico roble resistir hasta la muerte, contra la opinión de todos, busca una salida diplomática. Quería ahorrar muertes al enterarse de los fusilamientos masivos de mujeres y niños sobre las riberas del río Ibaizabal, anunciando que sólo reclamaba tratamiento humanitario para civiles no combatientes y prisioneros de guerra.
La pelea en Eibar y Durango fue intensa. Los milicianos resistieron hasta la extenuación. Cuando se acabaron las balas, buenas fueron las pedradas. Tres mil terminaron prisioneros y los demás optaron por una dura retirada. El camino a Bilbao estaba expedito para los nacionalistas. Hitler presiona. Konstantin von Neurath amenaza con declarar la guerra a la República moribunda, si el gobierno de Franco no se aviene a sus exigencias. Reclaman vía libre. Los generales Mola y Cabanellas Ferrer, en nombre del autodenominado Caudillo de las Españas por la Gracia de Dios, ceden. Ya no hay límites posibles. El mariscal Göring confesó ante el Tribunal de Nüremberg que la presencia alemana, en España, pretendía “por medio de esta oportunidad entrenar a mi joven Luftwaffe en tal o cual detalle técnico” y estudiar clínicamente las consecuencias de un ataque terrorífico.
La orden llegó. Era un lunes de mercado. Los guerniqueses transitaban por sus calles, tratando de olvidar las angustias del momento. Los rumores del fragoroso combate que se libraba en Marquina se escuchaban a lo lejos. El viento del este portaba el murmullo. A las cuatro y media de la tarde se hizo la noche. Los aviones de la Legión Cóndor, apoyados por algunos italianos, se recortaron en el horizonte. Durante más de tres horas descargaron 30 toneladas de bombas y ametrallaron sin piedad a los que pretendían ponerse a salvo. Guernica no formaba parte de los objetivos militares inmediatos; tampoco estaba en el camino de la batalla. No pasaban cinco minutos sin que aparecieran en el cielo nuevos aviones criminales, recordó un sobreviviente. Don Pablo, allá por 1983, como pudo avanzó en sus recuerdos. Sus ojos, acerados, estaban cuajados de lágrimas. Sus puños, crispados. Describió el paisaje en llamas. Su desesperación al ver desaparecer a su madre. Tenía nueve años. “El ruido de los motores de los aviones es atroz. Sueño con mis hermanos. Los veo destrozados por las ametralladoras. No se cómo ni cuanto camine. Desperté. Quise volver…”
El ataque fue selectivo. Buscaban destrozar la historia. Guernica fue, es y será sinónimo de libertad. Se intentaba, con su destrucción, desmoralizar a la población, minando su capacidad de de lucha. El Gernikako Arbola es símbolo, fe y compromiso. Sus retoños, esparcidos por el mundo, sobreviven a la barbarie. Los corregidores desde –al menos- el siglo IX, cuando juró el primer señor de Bizcaya, han sido electos por el pueblo y bajo la sombra del roble juran defender su independencia. Han resistido a todos los intentos. Franco, Hitler y Mussolini fracasaron en el suyo. Resignificaron el pacto. No alcanzó la maquinaria publicitaria del nazismo para evitar la condena internacional. Si hasta los diarios más conservadores del mundo que desde sus editoriales habitualmente exaltaban el ideario falangista, tuvieron que censurarle. Dijeron, primero, que el atentado fue obra del Ejército Rojo, pocas horas más tarde, se desdijeron trasladando la responsabilidad a los italianos. Tampoco fue eficaz el tardío del mexicano José de Vasconcelos, olvidando antiguos compromisos libertarios, se inclinó hacia la hipótesis de un accidente. “La verdad –dijo- es que una bomba de los franquistas cayó por accidente en la ciudad produciendo algunos daños, pero provocando la salida de la guarnición republicana, y fueron los izquierdistas al salir de la población los que la incendiaron y causaron destrozos”, ni la maquinaria vaticana que forjó una versión absurda como la de un enojo entre republicanos que, en Argentina, tradujeron Monseñor Santiago Luís Copello y Gustavo Franceschi, concluyendo en un escandaloso fraude que comprometió a una supuesta Cruzada pro Iglesias desvastadas de España que, en abril de 1937, había solicitado se cantara una misa de acción de gracia por el éxito del ataque.
Todas estas falacias las demolió, temprano, el testimonio del cura Aronategui, a la sazón alcalde de Guernica: “No fue –dijo- nuestra milicia quien incendió Guernica. Si el solemne juramento de un cristiano y alcalde vasco tiene algún valor, yo juro ante Dios y la Historia que los aviones germanos bombardearon bárbaramente nuestra querida Guernica hasta que la hicieron desaparecer de la tierra”.

Publicado en El Balcón. Comercio y Justicia, miércoles 25 de abril de 2007


Un tapíz del poder anti-guerra del cuadro "Guernica" cuelga en la puerta del Consejo de Seguridad de la ONU desde 1985.


Fuente: The Ambassadors

domingo, 22 de abril de 2007

The Misfits

"He could have written me anything, and he comes up with this." Marilyn Monroe
(Blonde Heat: The Sizzling Screen Career of Marilyn Monroe by R. Buskin)

Una película sobre un divorcio en Reno. The Misfits (Los inadaptados) (1961) VIDAS REBELDES es un drama conmovedor sobre la muerte en el viejo Oeste del director John Huston y del guionista Arthur Miller, que estuvo brevemente casado con la estrella Marilyn Monroe, de 1956 a 1960, y para la que que escribió la película. Originariamente se trataba de un relato corto. Miller experimentó la desintegración de su matrimonio durante la producción de la pelicula y aguardaba su propio divorcio de Marilyn. Anunciaron su separación en cuanto el rodaje estuvo terminado. (Irónicamente, la pelicula se rodó en Reno, Nevada, donde era frecuente que las parejas separadas intentaran conseguir el divorcio). Los titulares de algunos de los carteles de la pelicula decían:

Se grita y se canta con vida... se explota con amor!


Durante el rodaje de esta legendaria película se dieron cita prestigiosos fotógrafos para dejar imborrables recuerdos y maravillosas tomas de esta espectacular concurrencia de estrellas, de cine, fotografía y literatura, y de la la vida misma.
Una de las convocadas fue Inge Morath que en su recorrido hasta Reno realizó un maravilloso trabajo que quedó recogido en el libro The Road to Reno.


El libro está compuesto de las fotos que Morath tomó mientras ella y Henri-Cartier Bresson hicieron durante dieciocho días el viaje por carretera desde Nueva York hasta Reno para trabajar en el rodaje de The Misfits. Se incluyen las notas que "escribía cada noche en la mesa del motel que era siempre un lugar diferente pero que parecía siempre el mismo".

"La carretera es ancha y la arquitectura cubicula de los lugares de carretera y moteles es monónota pero limpia y bastante acogedora. Hay una magnífica tranquilidad, la carretera se hunde bajo los árboles y los arboles se ondulan hasta las lejanas colinas y montañas y valles".

En el rodaje de The Misfits, Morath hizo fotos memorables de Marilyn Monroe y Arthur Miller. Los dos estaban casados entonces, pero el matrimonio estaba destinado a romperse. John Huston, el director de The Misfits, escribió sobre la pareja en sus memorias, An Open Book (1980):
"Una tarde iba en coche por ahí lejos de donde estábamos rodando – a millas del desierto – cuando ví a Arthur solo. Marilyn y sus amigos no le habían ofrecido traerle de vuelta, ellos acababan de dejarle. Si yo no le hubiera visto, se habría quedado tirado allí. Me compadecía cada vez más de él".

Marilyn Monroe & Arthur Miller ©Inge Morath/Magnum photos
Arthur Miller y Marilyn Monroe en el Hotel Mapes en Reno, Nevada


La comprensión de Morath también estuvo con Miller. Se casó con él en 1962.
Miller y Morath no estuvieron juntos durante e
l rodaje – su romance empezó después – y estuvieron un poco atormentados por Monroe, por supuesto – que murió en el 63... pero Morath tenía una buena cabeza sobre sus hombros y se llevaba muy bien con Monroe. Años más tarde le preguntaron a Morath cómo se sentía de ser la que vino después de Marilyn Monroe – y Morath dijo: “Tienes que recordar que yo también tuve una gran carrera en mi propio campo, y además había tenido un número tremendo de novios guapos”. Tenía 65 años cuando dijo esto. Ella quería a Marilyn Monroe – dijo que después de que se casara con Arthur Miller había tenido un sueño recurrente donde ella y Marilyn Monroe bailaban juntas.
Inge Morath and Arthur Miller at their home, Roxbury, Conneticut, 1962. ©Dennis Stock/Magnum Photos.


"Don't think, honey, just throw...'' John Huston

Photo by Inge Morath, Reno Nevada 1960 (Magnum Photos, Inc.)

"En The Misfits, su interpretación como actríz dramática fue extraordinaria, pero no estoy seguro de si toda aquella tortura fue peor que el resultado... toda aquella agonía... nada fue peor...”.
Arthur Miller. Monty-a biography of Montgomery Clift


"Sobre mi última película, The Misfits, gusta a la gente, excepto a mí.
Estaba desilusionada."

Marilyn Monroe



"He tenido dos grandes papeles en mi carrera. Rett Butler y este."
Clark Gable


Esta maravillosa foto de portada es de Look Maga
zine. Desde que esta película fue filmada en blanco y negro,
las fotos en color del rodaje parecen más llamativas.
La luz parece dorada en este intimista momento entre Gable y Monroe.

Ernst Haas/Magnum 1961





Miller y Huston escuchan con atención embelesada como Marilyn explica su interpretación de una escena. Es apreciable el evidente movimiento de manos de Marilyn cuando ella habla. Es posible que el guión que sostiene en su regazo sea uno de los que fueron en un paquete a subasta en Christies.


***


El redondeo termina como un fracaso financiero, pero desde la experiencia traumática, Roslyn y Langland hacen un nuevo comienzo juntos. En la escena final Roslyn pregunta a Langland:
- Roslyn: Gay, si pudiera ser una persona en el mundo, una niña que pudiera ser valiente desde el principio – me asustaría cuando me preguntaras, pero ahora no lo estoy mucho, y tu?.
- Gay: No.
- Roslyn: ¿Cómo encuentras tu camino en la oscuridad?.
- Langland: (señalando la oscuridad del cielo) Sólo por esa gran estrella. El camino debajo de ella nos llevará derechos a casa.




Fuentes: Filmsite alec soth - blog
Preston’s Marilyn Monroe Archives, The Misfits



Danubio

Exposición inédita de la fotógrafa Inge Morath en el Centro Andaluz de la Fotografía. Almería, del 12 de abril al 30 de mayo, 2007. Escuela de Arte de Almería.
Foro Cultural de Austria.


Sulina Kanal. 1994




El trabajo que se presenta en la exposición recoge una serie de 75 imágenes realizadas por Morath a lo largo de más de 30 años en torno al río Danubio y las ciudades y enclaves
cercanos a él. La muestra plasma de forma fotográfica la influencia que ha tenido este importante río en todos los lugares por los que pasa en su discurrir.








"El Montmartre Húngaro" se halla a 20 kilómetros río arriba desde Budapest. Hogar de numerosos artistas, son típicos los coloridos bordados de las mujeres de Szentendre y de los alrededores.
Hungria. Szentendre. 1993










En el Café Blummensträussl todo es de estilo Biedermeier salvo la cafetera.

Austria. Grein. 1994



"Antes de emprender un proyecto, siempre trato de conocer el contexto general, de impregnarme de la civilización involucrada y de aprender, al menos, los rudimentos del idioma: sólo entonces estoy en condiciones de alcanzar, con una gran libertad, lo que Bresson caracteriza como actitud decisiva del fotógrafo: toma su fotografía con un ojo muy abierto, que observa el mundo a través de un visor, mientras que el otro, cerrado, mira el interior de su alma".
Inge Morath (1975)


Inge Morath (Graz, Austria 1923 - Nueva York 2002), la fotógrafa que, según su marido, el dramaturgo Arthur Miller, tenía 'la capacidad de captar la celebración de la vida'. Morath tenía un vínculo especial con España desde que descubrió el país en los años cincuenta. A lo largo de su carrera, había trabajado en todos los continentes, con todos los grandes del mundo de la fotografía y para todas las publicaciones más reconocidas. Sus retratos captaban la huella de los sentimientos; sus paisajes definían los lugares con exactitud casi literaria. Era conocida como la dama de la fotografía.

Lás imágenes de la fotógrafa austríaca, que colaboró con Cartier-Bresson, Erns Hass y Robert Capa, se caracterizan por su gran sensibilidad.




Fuentes: National Press Photographers Association La Fotografía Ideal El Pais ENTERATE

viernes, 13 de abril de 2007

Anna Karenina









«El propósito de un escritor no consiste en resolver una cuestión de una vez para siempre,
sino obligar al
lector a ver la vida en todas sus formas, que son infinitas»

Lev Nikolaevich Tolstoï




Анна Каренина


"Anna Karenina". Tolstoi (1887)


Primera parte

"Todas las familias dichosas se parecen entre sí, del mismo modo que todas las desgraciadas tienen rasgos peculiares comunes".

Nota: Frase inicial del capítulo I

"Himmlisch ist's, wenn ich bezwungen
Meine irdische Begier;
Aber doch wenn's nicht gelungen,
Hatt' ich auch recht hübsch Plaisir!"

Traducción: "Estoy contento cuando he podido vencer el deseo de mi carne; pero, si no lo logro, tengo al menos el placer para mí."

Nota: Capítulo XI, en alemán en el original.

"Honni soit qui mal y pense!"

Traducción: "¡Infame sea el que piense mal!"

Nota: Capitulo XVII, en francés antiguo en el original. Es una cita atribuida al rey Eduardo III de Inglaterra, que Esteban Arkadievich reproduce jocosamente.

"El café no llegó nunca a beberse. Se derramó de la cafetera, vertiéndose sobre la alfombra, ensució el vestido de la Baronesa y salpicó a todos, pero alcanzó su objetivo, que parecía ser provocar el regocijo y la risa general."

Nota: Capítulo XXXIV.



- Greta Garbo. 1935 -





























Segunda parte


"-Las mujeres con sombra terminan mal generalmente -contestó una amiga de Ana."


Nota: Capítulo VI.


"-La mujer, amigo mío, es un ser que por más que lo estudies te resulta siempre nuevo."

"-Entonces vale más no estudiarlo."

"-¡No! Un matemático ha dicho que el placer no está en descubrir la verdad, sino en el esfuerzo de buscarla."


Nota: Capítulo XIV. Diálogo entre Esteban Arkadievich Oblonski y Constantino Levin.



Tercera parte


"-Creo que ninguna actividad puede ser duradera si no está basada en el interés personal. Esto es una verdad general, filosófica -sentenció, subrayando la palabra «filosófica» como para demostrar que él también, como los demás, tenía derecho a hablar de filosofía."

Nota: Capítulo III. Constantino Levin.



Cuarta parte



"-Se puede ofender a una persona honrada, o a una mujer honrada; pero decir a un ladrón que lo es significa sólo la constatation d'un fait."

Nota: Capítulo IV. Karenin.

"-He oído decir que las mujeres aman a los hombres hasta por sus vicios -empezó de repente-, pero yo odio a mi marido por su bondad."

Nota: Capítulo XXI. Ana Karenina.




Tatiana Samoilova as Anna
in the 1967 Soviet screening of Tolstoy's novel






























Ampliamente reconocida como la cúspide del realismo de ficción, Tolstoi consideró este libro su primera novela verdadera. El personaje de Anna estaba probablemente inspirado, en parte, en Maria Hartung (1832-1919), la hija mayor del poeta ruso Alexander Pushkin. Poco después de conocerla en la cena, Tolstoi empezó a leer la prosa de Pushkin hasta que tuvo un ensueño flotante de “un aristocrático exquisito codo desnudo”, que resultó ser el primer indicio del personaje de Anna.



Sophie Marceau. 1997



"Ana Karenina" es también un constante fluir de idílicos viajes en tren entre las fascinantes Moscú y San Petersburgo.



Fuentes:
Greta Garbo - Ma Star à moi: Magnífico blog sobre Greta Garbo de CICCIONE
El Universal
Wikiquote
Search Reference
Ballet-dance

miércoles, 4 de abril de 2007

Intermezzo























Ingrid Bergman och Gösta Ekman

Gustav Molander. "Intermezzo". 1936



El intermezzo es un término utilizado en el S.XVIII para una serie de piezas de carácter cómico que eran interpretadas entre los actos o las escenas de una ópera. Los intermezzi (intermezzo en plural) eran utilizados a la manera de los intermedios renacentistas.


A medida que iba evolucionando, el intermezzo, sin perder su carácter cómico, fué adquiriendo una trama propia, sobre todo en las óperas serias venecianas. A partir de 1.720, el intermezzo comenzó su edad de oro, principalmente por mérito de un compositor: Pergolesi y su obra La selva padrona. Posteriormente, los intermezzi fueron sustituidos por ballets como principales diversiones del entreacto en la ópera seria.

Ya en el S.XIX, el término intermezzo empezó a utilizarse en obras instrumentales, principalmente para piano solo. Compositores como Schumann y Brahms compusieron obras con este término para piano; todas ellas caracterizadas por un lirismo muy patente.


Fuentes: Melómanos
Mundofree

domingo, 1 de abril de 2007

El Village

The city from Greenwich Village. John Sloan. 1922


“Well, isn’t Bohemia a place where everyone is as good as everyone else—and must not a waiter be a little less than a waiter to be a good Bohemian?”
"Becoming Intimate with the Bohemians” Djuna Barnes, New York Morning Telegraph Sunday Magazine (Nov. 19, 1916).

Fuente: The Columbia World of Quotations



from Becoming Intimate with the Bohemians

Una noche doblaba la esquina de la Sexta Avenida con Greenwich Avenue, cuando una mujer elegante, con pieles, muy cargada de joyas y con dos larguiruchas hijas, me llamaba la atención. En sus ojos había una inquietud que resultaba extraña para alguien como yo que estaba acostumbrada a ser mirada por tranquilas e incluso perezosas caras. Sus ojos deambulaban al azar, así como los de sus hijas. Había un aire definido del perdedor buscando lo perdido.
“¿Dónde está Greenwich Village?” preguntó tomando aliento.
“Es esto”contesté, pensaba que se iba a desplomar.
“Pero”, tartamudeó, “he oido de casas viejas y de hombres y mujeres extraños que se sientan en los bordillos citando poesía a los policias o pescando panecillos que flotan en el Battery cuando llueve. He oido de tabernas pequeñas donde las mujeres fuman y los hombres hacen el amor y hay baile y risa y no demasiada luz. He oido de casas a rayas como las cebras con oro y plata, y de vestidos largos que ... ¡Rápido, rápido!” gritó de prontó, interrumpiendo la mitad de la frase y agarrando de cada mano a una niña exactamente como la Reina Blanca en “A través del espejo” mientras se apresuraba hacia delante “Ahí hay una!”.
Entonces se marchó en la persecución de una mera mujer con un vestido largo de hilo de algodón tintado con una carpeta debajo del brazo.

-Djuna Barnes, 1892-1932