lunes, 31 de mayo de 2010

Fame

This is fame: Sundays,
an emptiness
as in Balthus,

cobbled alleys,
sunlit, aureate,
a wall, a brown tower

at the end of a street,
a blue without bells,
like a deal canvas

set in its white
frame, and flowers:
gladioli, lame

gladioli, stone petals
in a vase. The choir's
sky-high praise

turned off. A book
of prints that turns
by itself. The ticktock

of high levels on a sidewalk.
A crawling clock.
A craving for work.


Derek Walcott (Santa Lucía, 1930)
Premio Nobel Literatura 1992



Esto es la fama: los domingos, un vacío como en Balthus, pasadizos empedrados iluminados por el sol, una torre y un muro, dorados, al final de la calle, un azul sin campanas, como una tela muerta fija en su blanco telar, y flores: gladiolos, gladiolos estropeados, pétalos de piedra en un jarrón. La plegaria celeste del coro se acaba. Los grabados de un libro que se hojean por sí mismos. El tic tac de unos tacones altos sobre la acera. Un reloj muy lento. Un deseo de trabajar.



Imagen: Girl with ball, 1962
Roy Lichtenstein, Nueva York (1923-1997)
MOMA, N. Y.

viernes, 28 de mayo de 2010

Lilith


Te liberaste Lilith
dejaste el Paraíso
para crear tu estirpe
nunca quisiste ser
la mujer sometida
del aburrido Adán
desafiaste al vacío
inventaste la risa
estabas sola
sola
buscando infatigable
tu destino
del fondo de tu angustia
se levantó tu risa
bailaste ante la luna
una impúdica danza
y reíste
reíste
rayaste con tu risa
el universo.
Se sonrojó la luna
y te acunó en su seno
supiste en ese instante
que eras ángel caído
y por primera vez
sentiste a Dios
en ti.


De Mitos y Delitos, 2006
Claribel Alegría (Estelí, Nicaragua, 1924)



Foto: La bailarina Nikolska en el Partenón, 1929
por la fotógrafa griega Nelly (Elli Seraidari) (1899-1998)
(Archivo fotográfico del Museo Benaki. Atenas)

viernes, 21 de mayo de 2010

Colombia


Una carta rumbo a Gales
de Juan Manuel Roca (Medellín, 1946)

Me pregunta usted dulce señora
Qué veo en estos días a este lado del mar.
Me habitan las calles de este país
Para usted desconocido,
Estas calles donde pasear es hacer un
Largo viaje por la llaga,
Donde ir a limpiar luz
Es llenarse los ojos de vendas y murmullos.

Me pregunta
Qué siento en estos días a este lado del mar.
Un alfileteo en el cuerpo,
La luz de un frenocomio
Que llega serena a entibiar
Las más profundas heridas
Nacidas de un poblado de días incoloros.

¿Y el sol?
El sol, un viejo drogo que ha lamido esas heridas.
Porque sabe usted , dulce señora,
Es este país una confusión de calles y heridas.
La entero a usted:
Aquí hay palmeras cantoras
Pero también hay hombres torturados.
Aquí hay cielos absolutamente desnudos
Y mujeres encorvadas al pedal de la Singer
Que hubieran podido llegar en su loco pedaleo
Hasta Java y Burdeos,
Hasta el Nepal y su pueblito de Gales,

Donde supongo que bebía sombras su querido Dylan Thomas.

Las mujeres de este país son capaces
De coserle un botón al viento,
De vestirlo de organista.

Aquí crecen la rabia y las orquídeas por parejo,
No sospecha usted lo que es un país
Como un viejo animal conservado
En los más variados alcoholes,
No sospecha usted lo que es vivir
Entre lunas de ayer, muertos y despojos.



Foto: Valle del Cocora, Colombia
de Ana Muñoz (Almería, 1970)



viernes, 14 de mayo de 2010

La atención a las palabras

(803)

Herta Müller


Dass mich die kleine
Heimat die
es je gab
am fünften Zeh mit der
großen Wolkenglatze und der
Mütze eines Staates und
den Augen einer Ziege undder Schenauze einer Rattefamiliar leergefressen hatten



Herta Müller. Gamla Stan - Stockholm

Que a mí
la patria
pequeña como
jamás la hubo
en el quinto dedo del pie
con la gran calva de las nubes
y el gorro de un Estado y
los ojos de una cabra y
el hocico de una rata
me devoró familiarmente


"Lo que has vivido bajo una dictadura no se olvida cuando arrancas una hoja del calendario".

"La lengua no es una patria".

"No hay nada más extraño que una patria donde no se pueda vivir".

En 1987, Müller marchó a Alemania con su marido, el novelista Richard Wagner, y establece su residencia en Berlín. Es entonces cuando inicia la composición de sus poemas mediante la técnica del collage. Utiliza para ello recortes de periódicos y revistas y empieza a coleccionar palabras que mantiene depositadas en una mesa. "Las palabras se llenan de polvo, no se pueden limpiar las palabras" por lo que las guarda en cajones donde permanecen y esperan hasta que ella las recoja para formar un texto. "Siempre he pensado que las palabras en el cajón tiene que ver con mi experiencia de la emigración, es como esperar en la estación del tren a ser recogida". En la novela trata del efecto de las dictaduras en las personas, no hay mucha posibilidad de jugar porque el tema no lo permite. Con esta técnica puede jugar aunque tampoco logra escapar ya que piensa que el texto resultante no es tan divertido como parece. Este juego le ha servido para tratar sus propios daños sufridos. "Cuando salí de Rumanía tenía los nervios bastante destrozados y esta actividad me ayudó". "Cuando uno tiene la palabra en la mano el contacto es más íntimo, una palabra sacada de la mente no la puedes ver. Lo extraño es que las palabras en el cajón encuentran una pareja que cuentan una historia. Cuando están pegadas en la tarjeta ya no se pueden cambiar, así que es como la vida misma, tiene sus límites. A la hora de plasmarlas también está la limitación del espacio puesto que deben ajustarse al tamaño de una tarjeta y a su vez deben guardar un sentido, por lo que me toca sacrificar palabras -también como en la vida- que vuelven al cajón. Las palabras también envejecen como las personas, por la porosidad del papel". "Se trata de un trabajo sensorial del que he aprendido mucho".


Versos de su discurso de agradecimiento por el Premio Nobel de Literatura 2009

Cada palabra en tu cara
Sabe algo del círculo vicioso
Pero no lo dice

miércoles, 12 de mayo de 2010

Wrong Number

Ernesto Cardenal cuenta que se encontraba en Colombia haciendo el seminario para ordenarse sacerdote cuando llega la noticia de la muerte de Marilyn, que le inspira la siguiente Oración:

Señor
recibe a esta muchacha conocida en toda la Tierra con el nombre de
Marilyn Monroe, aunque ése no era su verdadero nombre
(pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita violada a los
9 años y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar)
y que ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje
sin su Agente de Prensa
sin fotógrafos y sin firmar autógrafos
sola como un astronauta frente a la noche espacial.

Ella soñó cuando niña que estaba desnuda en una iglesia (según cuenta
el Times) ante una multitud postrada, con las cabezas en el suelo
y tenía que caminar en puntillas para no pisar las cabezas.
Tú conoces nuestros sueños mejor que los psiquiatras.
Iglesia, casa, cueva, son la seguridad del seno materno
pero también algo más que eso...
Las cabezas son los admiradores, es claro
(la masa de cabezas en la oscuridad bajo el chorro de luz).
Pero el templo no son los estudios de la 20th Century-Fox.
El templo -de mármol y oro- es el templo de su cuerpo
en el que está el hijo de Hombre con un látigo en la mano
expulsando a los mercaderes de la 20th Century-Fox
que hicieron de Tu casa de oración una cueva de ladrones.

Señor
en este mundo contaminado de pecados y de radiactividad,
Tú no culparás tan sólo a una empleadita de tienda
que como toda empleadita de tienda soñó con ser estrella de cine.
Y su sueño fue realidad (pero como la realidad del tecnicolor).
Ella no hizo sino actuar según el script que le dimos,
el de nuestras propias vidas, y era un script absurdo.

Perdónala, Señor, y perdónanos a nosotros
por nuestra 20th Century
por esa Colosal Super-Producción en la que todos hemos trabajado.
Ella tenía hambre de amor y le ofrecimos tranquilizantes.
Para la tristeza de no ser santos
se le recomendó el Psicoanálisis.
Recuerda Señor su creciente pavor a la cámara
y el odio al maquillaje insistiendo en maquillarse en cada escena
y cómo se fue haciendo mayor el horror
y mayor la impuntualidad a los estudios.
Como toda empleadita de tienda
soñó ser estrella de cine.
Y su vida fue irreal como un sueño que un psiquiatra interpreta y
archiva.
Sus romances fueron un beso con los ojos cerrados
que cuando se abren los ojos
se descubre que fue bajo reflectores
¡y se apagan los reflectores!
Y desmontan las dos paredes del aposento (era un set cinematográfico)
mientras el Director se aleja con su libreta porque la escena ya fue tomada.
O como un viaje en yate, un beso en Singapur, un baile en Río
la recepción en la mansión del Duque y la Duquesa de Windsor
vistos en la salita del apartamento miserable.
La película terminó sin el beso final.
La hallaron muerta en su cama con la mano en el teléfono.
Y los detectives no supieron a quién iba a llamar.
Fue como alguien que ha marcado el número de la única voz amiga
y oye tan solo la voz de un disco que le dice: Wrong Number
O como alguien que herido por los gangsters
alarga la mano a un teléfono desconectado.

Señor:
quienquiera que haya sido el que ella iba a llamar
y no llamó (y tal vez no era nadie
o era Alguien cuyo número no está en el Directorio de los Ángeles)
¡contesta Tú al teléfono!

jueves, 6 de mayo de 2010

Negociaciones complejas


Mi cansancio
mi angustia
mi alegría
mi pavor
mi humildad
mis noches todas
mi nostalgia del año
mil novecientos treinta
mi sentido común
mi rebeldía.


Mi desdén
mi crueldad y mi congoja
mi abandono
mi llanto
mi agonía
mi herencia irrenunciable y dolorosa
mi sufrimiento
en fin
mi pobre vida.


Eso. Idea Vilariño (1920-2009)